Procesos y AprendizajeProcesos y AprendizajeProcesos y AprendizajeProcesos y Aprendizaje
  • Qué hago
  • Quién soy
  • Blog
  • El Formador 5.0
  • Descargas
  • Contacto

La ruina de mi negocio

David Barreda 23 octubre, 2017
David Barreda formación marca personal branding docencia

#citaciega

“…llevaba tanto tiempo hablando

que terminó olvidando lo que decía…”

 ‘Lengua’, de Fátima M. Roldán

.

Voy a compartir un conflicto que tengo. Dicen que un conflicto es una colisión de valores, esto es, algo interno que nos genera disonancia porque hay dos fuerzas que rivalizan interiormente en ti y no van precisamente en la misma dirección…

…pues eso, que tengo un conflicto… bueno, a ver, en realidad no tengo solo uno, tengo un puñado… pero hoy voy a compartir uno de los que tiene que ver con mi trabajo, con mi proyecto profesional, su desarrollo, su evolución…

Por eso, para entender bien el post debes saber que trabajo por cuenta propia y ofrezco servicios de formación, acompañamiento y consultoría… esto es, intangibles basados en la generación o gestión del conocimiento, dedicándome en exclusiva a ello.

Este es el contexto en el que se me crea el conflicto… un contexto en el que se puede ‘morir de éxito’ aún no habiendo tenido éxito en nada.

.

Generando (necesarias) oportunidades

La movida es la siguiente. Durante mucho tiempo he tenido el foco en generar(me) oportunidades, esto es, abrir puertas que me den acceso a clientes y proyectos que permitan darle cuerpo a mi propuesta profesional, obtener ingresos y avanzar en este sentido. Llega un momento en el que te das cuenta que esta dinámica no se terminará nunca, así que o articulas las estrategias y los medios adecuados para que este ‘ponerte en valor’ sea lo más nutritivo y sostenible posible o vas listo… así que vas indagando, probando e incluso conociéndote en tu propia estrategia de posicionamiento para ir rectificando el rumbo según proceda.

Lo anterior implica aceptar, abierta y sanamente, que nunca vas a llegar a ningún sitio. Esto es, tal y como está el panorama, el que hoy tengas mucho trabajo no correlaciona necesariamente con que mañana vayas a tener como mínimo la misma cantidad de trabajo… o que cada día vayas a más. Creerse ‘un profesional consolidado’, hoy en día, me parece un acto de temeraria soberbia.

Todo esto te va modelando. Así, puedes optar por vivir esta incertidumbre como un castigo divino y verte errando por los desiertos profesionales en busca de oasis permanentes aún a sabiendas de que todos tienen fecha de caducidad… o disfrutar de lo que te vaya ocurriendo, encontrar tus equilibrios en el camino y vivir la incertidumbre como algo natural y no como una amenaza del universo contra ti (para que no descanses y sufras). Una cuestión de gestión emocional, foco y proyecto.

…pero claro, esto no es todo…

.

Mantener la cometa en el aire

…pues eso, que no solo basta con abrir puertas…

Y es que las puertas se van abriendo. Con trabajo, constancia, honestidad en lo que ofreces y haces, y trabajo (ya, ya sé que lo he dicho), y más trabajo y estrategia, y más trabajo… el tema es que las puertas se van abriendo y las oportunidades van apareciendo…

…y todo esto es muy bonito y muy chulo, y desprende un aromilla a ‘logro’ que embriaga lo suyo. Y ello a pesar de que, si bien hay puertas que se abren y son muy rentables en las que el retorno profesional y/o económico se ajusta a los esfuerzos invertidos, hay otras que son un auténtico fraude (aunque pudieran parecer lo contrario) …

… ¿y después de abrirlas? Después de abrirlas el reto está en mantenerlas abiertas. No me refiero a que el mismo cliente te vuelva a llamar una y otra vez (que también, ya que es una forma de éxito profesional muy contundente) …me refiero a guardar tu posición, manteniéndola con una oferta además de útil, fresca y actualizada.

…y aquí empieza a aparecer el conflicto. Igual que el que tiene un local de negocios y cada cierto tiempo tiene que reformar, pintar y acondicionar… el que tiene un negocio basado en la gestión de conocimientos igualmente tiene que reformar, pintar y acondicionar… cada cierto tiempo, o mejor dicho, cada dos por tres, de una forma rigurosa y coherente.

…pero esto que parece obviamente necesario, tanto como el comer sanamente o hacer deporte, ocurre que se ve desplazado por ‘otras urgencias’… hay que trabajar, buscar trabajo, atender a lo que vaya saliendo… y ya nos iremos cuidando (por el camino)…

.

Rápido o riguroso

Es cierto que a estas alturas todo profesional independiente, en activo y sobreviviendo, tiene asumido de que necesita estar en ‘aprendizaje constante y permanente’, que lo aprendido tiene fecha de caducidad y que las estructuras del conocimiento están en alteración continua.

De hecho, lo que ha ocurrido con nuestros perfiles profesionales en los últimos diez años, en muchos casos, es lo más parecido a una ‘teoría de la evolución a cámara rápida’, buscando la adaptación al medio desesperadamente. Pura cuestión de supervivencia.

Y en esta carrera por la supervivencia encontramos diferencias significativas en cuanto a la estrategia a seguir. Así, hay quienes deciden ir saltando de moda en moda, mutando imperfectamente para adaptarse a la corriente que estiman con ‘mejor caudal’ en cada momento (buscando un beneficio rápido); y quienes tratan de alinear su proceso de adaptación a sus competencias y su entorno (son los que creen en que el éxito está en la solidez y la coherencia de sus itinerarios).

Los primeros son más ágiles, pero menos rigurosos. Los segundos quizás sean más lentos a la hora de responder, pero ganan en rigor y fiabilidad.

.

La gran apuesta

¿Cuál de las dos vías propuestas parece más efectiva? Literariamente la cuestión es sencilla de responder: es mejor ser riguroso y fiable. Es bueno para ti, para tu proyecto y para tus clientes. No obstante, en la práctica, me asusta la cantidad de veces que nos sentimos amenazados por la prisa (en responder a una demanda) y la necesidad (de facturar para vivir), el estado de ánimo que esto genera y lo que finalmente terminamos haciendo.

…y ni siquiera hablo de temeridad, esto es, aceptar un trabajo para el que no estás preparado ni tienes los recursos necesarios. No hablo de esa opción, totalmente descartada. Hablo de la pérdida de rigor progresiva que podemos sufrir o estar sufriendo si no hacemos la gimnasia mental necesaria y terminamos presentando el mismo menú, meneando lo que sabemos de una forma u otra, pero con una guarnición diferente cada vez… siendo lo peor de todo que las cosas así te estén saliendo bien, porque refuerza una ficticia sensación de que ‘lo que sabes es la verdad, funciona y tiene un recorrido infinito’.

Pero para romper esta inercia hace falta valor… sí, valor… para ganar tiempo y atención a lo importante. Puedes tener muy claro tu proyecto, tu foco, pero si no generas el tiempo para forjarlo y la atención para consolidarlo… todo se quedará en en nada, o una dirección que débilmente marca un rumbo que a la larga se pierde.

Quien trabaja con conocimiento necesita conocimiento. Aprender, ser alumno y maestro. Estudiar. Leer, en internet y fuera de internet. Indagar tendencias. Conocer experiencias. Saber qué funciona y qué no funciona. Ser riguroso. Atreverse, crear, probar, descartar y volver a intentarlo. Esto es, tener un departamento de I+D que en el caso del autónomo medio se antoja tan necesario como complicado de llevarlo a la práctica.

El gran problema es que es demasiado fácil caer en la tentación de trabajar a destajo. De atender todas las demandas que te llegan. Unas por necesidad, otras para guardar la continuidad con determinados clientes, otras para asegurar la despensa, incluso otras por tener el ego cubierto. Se juntan la necesidad y la pasión, una putada, arrastrando tus tiempos y espacios para centrarte, re-enfocarte y rediseñarte. El gran problema es que esa puede ser la gran ruina de mi negocio, o del tuyo, si te pasa lo mismo… generar oportunidades y atenderlas todas, a destajo, manteniendo los niveles adecuados de efectividad y calidad.

Y aquí el conflicto, y aquí la gran apuesta… ¿Cuándo llega el momento de decir NO a determinados trabajos? ¿A qué trabajos? ¿A qué colaboraciones?… ¿Para qué vas a decir que no?… ¿Qué ganas? ¿Qué pierdes?… Lo que estoy haciendo hoy ¿me acerca al lugar donde quiero estar mañana? Hay que parar, pero cuando paro… ¿a qué digo que no? …cuando parece que no se puede decir que no a nada.

…ahí lo dejo.

.

[NOTA: publicaba esta entrada hoy, día 23 de octubre a las 6:00… pues bien, son las 9:30 y leo un post de Eva Collado recién salido del horno… un post en el que precisamente se da una solución a este dilema que he compartido hoy contigo, encaja perfectamente, aquí lo tienes “Competencias profesionales: 12 reflexiones” , yo, por mi parte, tomo nota. Gracias Eva!]

.

.

1

David Barreda

Más posts de David Barreda

2 comentarios

  • Fernando Monteleone Responder 24 octubre, 2017 at 11:52 am

    Sin duda un interesante y útil artículo el cual nos hace reflexionar para tomar responsabilidad y actuar consecuentemente sobre el corto, medio y largo plazo de nuestra carrera profesional u negocio.

    Gracias por compartir

    • David Barreda Responder 25 octubre, 2017 at 8:22 am

      Muchas gracias, Fernando,

      …expresas muy bien la intención del post, efectivamente de eso se trata, de considerar el impacto de lo que hago hoy en lo que ocurrirá mañana.

      Un saludo y gracias por estar por aquí,

      David

Deja un comentario

Cancelar respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Suscríbete a mi Newsletter

ENVIAR
condiciones de uso

Thank you!

We will contact you soon.

Categorías

  • Aprendizaje
  • Charlas
  • Coaching
  • Desarrollo Personal
  • Desarrollo Profesional
  • Docencia y Didáctica
  • Empleo y Emprendimiento
  • Equipos e Inteligencia Colectiva
  • Formación
  • Inteligencia Emocional
  • Marca Personal
  • Miscelánea
  • Procesos
  • Procesos y Aprendizaje

Post más populares

¿Por qué coño no consigo trabajo de lo mío?

Posted on 17 octubre, 2014
01
david barreda orientación profesional marca personal branding equipos

¿Qué momento marcó tu vida profesional?

Posted on 13 noviembre, 2017
02

Buscar trabajo no es buscar ofertas

Posted on 29 enero, 2015
03
grupo de corredores

Cosas que he aprendido con gente que busca trabajo

Posted on 26 febrero, 2015
04

B.Y.N.M.W.T.S.

Posted on 30 septiembre, 2019
05

Etiquetas

andrés pérez ortega aprendizaje asertividad blog procesos y aprendizaje buscando inspiración coaching competencias comunicación creatividad david barreda desarrollo personal desarrollo profesional efectividad emociones empatía empleo emprendimiento Espacio Knowmads eva collado formación gestión emocional habilidades sociales inteligencia colectiva inteligencia emocional Knowmads liderazgo Marca marca personal metas y objetivos Networking orientación profesional personal branding proactividad procesos procesos y aprendizaje productividad propuesta de valor propósitos proyectos redes sociales toma decisiones toma de conciencia trabajo trabajo en equipo videos

Sígueme en mis redes

Facebook

Youtube

Twitter

Linkedin

Instagram

David Barreda contacto
Aviso legal · Cookies
  • Qué hago
  • Quién soy
  • Blog
  • El Formador 5.0
  • Descargas
  • Contacto
Procesos y Aprendizaje