Si la cuelo apruebo…

Acabo de cometer un error… un terrible error. No sé como ha podido suceder pero ha sucedido. Y esto ya no tiene vuelta atrás…

Verán, dentro de unos días comienzo mis exámenes. Estaba estudiando en mi habitación y después de agotar una hoja en sucio hago una bola con ella y miro fijamente a la papelera… se me cruza una idea… no lo hagas, me repito… pero no puedo evitar lanzarme el reto: “…si la cuelo apruebo”…

Estudio la situación: el diámetro de mi papelera debe tener unos veinticinco centímetros y el de la bola de papel unos cinco o seis, estoy situado a casi metro y medio de la papelera. Para que el reto sea válido me digo que debo estar en posición sentado, como si estuviera estudiando (que es lo que debería estar haciendo mientras pensaba todo esto)…

Respiro…allá voy… lanzo la bola de papel y… Oh!… me quedo corto, la bola se queda a diez centímetros del borde de la papelera. Le digo al universo que no es justo, que no puede ser, que no conocía el comportamiento de la bola en el aire y que el reto debe ser repetido. Segundo intento: vuelvo a quedarme corto. ¡¡No puede ser!!, quizás mantuve la muñeca demasiado rígida…, ¡tengo que poner más atención!…¡me estoy jugando las asignaturas!..

…venga, ¡va!.. ahora sí, nuevo reto, ahora de verdad: conseguir colarla en dos de tres ocasiones… lanzo la primera y acierto, me vengo arriba, voy a aprobar (pienso con ingenua seguridad)… lanzo la segunda y fallo… en la tercera también fallo… ¡¡no lo entiendo!! ¡¡llevo estudiando desde septiembre!!

Negocio con el universo… vale, la DEFINITIVA, ahora SÍ QUE SÍ… un intento, un solo intento… subo la apuesta: si la cuelo apruebo los exámenes de febrero y los de junio… siento que el universo acepta mi apuesta… ¡perfecto!¡allá voy!…

…respiro profundamente, relajo mi muñeca, calibro el peso de la bola de papel, pongo absoluta atención al tiro y…

…en fin, que no voy a aprobar.

…que acabo de tirar por la borda estos meses de estudio. Horas, días, fines de semana sacrificados, todo se esfuma. Todo por no colar la bolita de papel en la papelera… “con estas cosas no se juega”, me repito una y otra vez, y ya da igual lo que haga, da igual que me mate a estudiar estos días porque no voy a aprobar, porque no he colado la pelotita de papel en la papelera…

…y seguro que esto irá en cascada, y como no voy a aprobar tardaré en sacarme la carrera, y me desmotivaré, y abandonaré, y habré faltado a mi compromiso, y dejaré de ser un buen profesional, y mi vida será un desastre…