#citaciega
“…se levantó tan rápido
que se mareó
y perdió la noción de donde estaba…”
‘Huevos duros’, de Fátima M. Roldán
.
Es importante saber dónde estás poniendo tus huevos. Tus huevos son una parte delicada y dejarlos caer en cualquier sitio o de cualquier manera puede tener consecuencias dolorosas (y desastrosas).
Creo que es importante cuidarse los huevos de forma saludable, higiénica y consciente, esto es, pararse de vez en cuando y observarlos con detenimiento, dedicarle tiempo, ver qué tamaño tienen, cómo evolucionan, si uno es más grande que otro… examinar si nuestra atención, tiempo y energía se focalizan en ellos eficientemente (<- esto es importante).
Saber donde tienes los huevos es necesario ¿Te imaginas que no lo supieras?
También es importante saber lo que puedes hacer con ellos ¿Le sacas todo el partido a tus huevos?
Ojo, tampoco tienes que estar todo el tiempo tocándolos y mareándolos… o hablándole a la gente de ellos… si haces eso de manera compulsiva lo mismo se te acaban cayendo…
…presta atención a tus huevos… focalízate… a veces, estamos más pendiente de los huevos del vecino que de los propios… y se nos acaban pasando los nuestros… y un huevo pasado es una realidad deshecha…
… ¿Dónde estás poniendo los huevos?
.
Huevos
Aunque es algo bastante obvio, y aún asumiendo que puede resultar redundante, puede ser conveniente aclarar lo que debe entenderse por “huevo” en este contexto.
“Huevo” es toda actividad, relación, competencia o capital de cualquier tipo que tiene la facultad de generar algún retorno tangible y valioso para la persona que lo posee o lo participa, bien sea este retorno de tipo económico, comercial, social, profesional, etc.
Un “huevo”, en este caso, puede ser un cliente, una competencia profesional, un contacto, una relación, unos ahorros… en definitiva, aquello que forma parte de tu patrimonio y puede fructificar o generar beneficios de alguna forma.
Para una persona que trabaja por cuenta propia, sus huevos son muy importantes. Cuidar de ellos, no tenerlos en la misma cesta y saber diversificarlos es clave para su supervivencia y desarrollo profesional.
.
Tiempo muerto
Pero este cuidado y atención para el desarrollo de nuestro capital profesional requiere necesariamente de un tiempo de parada y reflexión, un tiempo que nos permita reconocer cómo estamos gestionando nuestros ‘huevos’, si los estamos acumulando en ‘la misma cesta’ o los estamos diversificando de una forma inteligente.
Se trata de…
…saber dónde estamos, considerando dónde queríamos estar y hacia dónde vamos, lo que nos aportará nuestra posición…
…conocer qué recursos estamos usando, cuáles nos sobran y cuáles echamos de menos, lo que nos permitirá hacer un adecuado inventario de las herramientas que necesitamos…
…hacer balance de las inversiones que hacemos de tiempo y trabajo en cada proyecto para conocer la rentabilidad que estamos obteniendo con nuestras acciones, lo que nos reencuadrará estratégicamente.
Y para ello, parar (o ralentizar) la actividad profesional en algún momento para observar todas estas variables me parece absolutamente necesario…
…ya, lo sé… a veces no podemos parar… o podemos parar solo muy poco tiempo y en ese tiempo no terminamos de deshacernos de las prisas y las urgencias… pero lo contrario, “ir sin mirar”, puede significar salirnos del camino y perdernos mientras nos desgastamos por senderos que no nos llevan a ningún sitio.
.
¿En qué me puedo fijar?
Para facilitar lo anterior es conveniente ser precisos y saber optimizar estos momentos de “auto-observación”. Tener claras las variables hacia las que orientar nuestro examen, de forma previa, nos ayudará enormemente a ello… de lo contrario, corremos el peligro de terminar deambulando entre reflexiones y generar más desorientación si cabe.
En mi caso, detecto que hay una serie de temas recurrentes que aparecen en estos momentos y, la verdad, me ayudan bastante en este sentido. A ver, sí… probablemente no me fije en todas las variables que existan, o se me escapen algunas relevantes… pero reconozco que todas estas que te apunto a continuación me dan mucha perspectiva para conocer mi posición en el mapa y reconocer qué aspectos de mi estrategia están funcionando y cuáles no…
Así que aquí te dejo algunas de las preguntas que me ayudan a saber dónde estoy poniendo mis huevos y cuál es el estado de mi marcha.
Espero que algunas de ellas puedan servirte.
.
Facturación
- ¿Siento que mi nivel de facturación es suficiente? ¿Cubre mis necesidades? ¿Y mis deseos?
- ¿Cuántas facturas emito al año? Y sobre las cantidades que facturo ¿Se distribuyen de forma equilibrada o se rompe el equilibrio por alguna parte?
- ¿A quién le facturo? ¿Qué clientes considero estratégicos según la información que extraigo de mis facturas? ¿Dependo de algún cliente (soy un ‘rehén’ o ‘falso autónomo’ de alguien)?
- ¿Qué margen de maniobra me dan mis ingresos para seguir con mi actividad de forma sostenible con mi persona y necesidades?
.
Preocupaciones
- ¿Sobre qué asuntos relacionados con mi actividad profesional dedico más pensamientos a lo largo de estos días, semanas, meses…?
- ¿Tengo definidas las cosas que me preocupan? ¿Qué nivel de preocupación tengo sobre cada una de ellas?
- ¿He vivido cosas similares anteriormente? ¿Qué pasó?
.
Ilusiones
- ¿Qué proyectos, actividades, etc., me ilusionan?
- ¿Siento que mi ilusión por mi proyecto va creciendo o decreciendo conforme pasa el tiempo?
- ¿Estoy en modo ‘lo mejor está por llegar’ o en modo ‘lo mejor ya ha pasado’?
.
Productividad
- ¿Le doy valor a mi tiempo? ¿Cómo?
- ¿Sé en qué contextos y momentos soy más efectivo?
- ¿Siento que el tiempo y energía que dedico a cada cosa tiene su adecuado retorno? ¿Rentabilizo mis esfuerzos?
- ¿Cuánto vale mi hora real de trabajo? (=todo el tiempo que dedico a un determinado proyecto entre lo que me pagan por ese proyecto) ¿Cómo me hace sentir?
- ¿Optimizo lo que ya tengo generado? (materiales, dinámicas, contenidos, etc.)
.
Desarrollo
- ¿Estoy leyendo?
- ¿Qué nivel de rigurosidad tiene lo que leo? (Libros, blogs, autores,…)
- ¿Qué fuentes me aportan algo más que una mera información u opinión?
- ¿Me estoy formando? ¿En qué debería formarme?
- ¿Estoy conociendo a gente nueva?
.
Innovación
- ¿Estoy haciendo cosas que antes no había hecho? ¿Cuáles?
- ¿Esas cosas nuevas, se las he visto a otras personas o no se las he visto a nadie?
- ¿Renuevo mi ‘fondo de armario’ o percibo que ‘estoy haciendo siempre lo mismo’?
- ¿Qué cambios percibo que he podido introducir en las últimas semanas, meses,…? ¿Se refieren al fondo o a la forma de lo que hago?
.
Posición
- ¿Estoy donde quiero estar?
- ¿Siento que voy en el camino adecuado?
- ¿Qué cosas pendientes tengo presentes en mi cabeza y no se me descuelgan?
- ¿Siento que estoy trazando un recorrido coherente y alineado con mis intenciones?
.
…y a ti ¿se te ocurre alguna pregunta más?
¡¡Buena semana y a caminar fuertes (y con sentido)!!
.
13
Genial David!!. Me lo quedo y me lo aplicó. Un besazo
Gracias Mari Carmen!